MASCULINIDADES EN RESISTENCIA

We're here. We're queer. Get used to it.

domingo, 28 de febrero de 2010

EROTIZAR LA RESISTENCIA

La vida está cargada de deberes que nos son impuestos desde afuera, por lo tanto injustos, como una manera de mantenernos bajo control y perpetuar esquemas de producción y reproducción que someten o anulan al sujeto.

Desanudarse del sistema resulta improbable porque es el marco en el que discurre toda la existencia, lo que sí es posible, es plantarle cara a un esquema que nos condena a un estado de subordinación que pocas veces o nunca se cuestiona; reflexionar la realidad social supone ya un gesto crítico.

Empoderarse es un acto de amor con uno mismo en el cual se resignifica la propia existencia y se recupera sólo lo que es importante para el sujeto. Largar lejos aquello que obstaculiza, lastra, jode, daña y limita al cuerpo, implica salir de los esquemas de género (que son de opresión y represalización) y emprender una erótica de la resistencia; repropiarse la capacidad de decir noes y síes.
Es también rescatar el cuerpo de la heteronormatividad que manda a trabajar, consumir y reproducirse; la triada maldita de la argamasa del género.

Erotizar la resistencia implica devolver al cuerpo espacios para el placer, disfrutar por el mero gusto de estar vivo, darle tiempo libre al tiempo, que fluya. Poder decir: quiero un cuerpo que sea realmente mío para compartirlo con quien yo quiera.

2 comentarios:

SergioAramis dijo...

Me pregunto si podré decir algo que en mi idiosincracia remataría perfecto lo que esta entrada dice...

Solo lo remataría desde mi diciendo Amén.

Y no es burla, es solo un simple así sea. O a lo mejor, vayamonos con un Ojalá, que aunque significaría "si dios quiere" para mi simplemente expresa un deseo en un futuro inmediato o no inmediato.

Por más que he de decir.
Me gustó mucho la entrada, y comparto gran parte de las ideas ahí plasmadas.

Es como dice Nietzche (no tengo la certeza de haber escrito bien el apellido): Uno es el que debe juzgar sus propios valores.

O algo así.

Me retiro.

Nos seguiremos leyendo pronto.

Atte.

Sergio Aramís

Anónimo dijo...

Decir sobre el deseo propio es importantísimo; pero una pregunta sería, ¿al dimensión del deseo -"erotizar la resistencia- conduciría automáticamente a una transformación de la desigualdad de género?