MASCULINIDADES EN RESISTENCIA

We're here. We're queer. Get used to it.

miércoles, 6 de octubre de 2010

¿MUNDO GAY?

Tiziano Ferro anuncia en una publicación italiana (según portal de hotmail de este 5 de octubre) que es homosexual, sumándose a la lista de celebridades -es un decir- que han salido del clóset en los últimos meses, además advierte estar convencido que tras esta declaración, nada será igual. Desde luego que nada será igual. Sobre todo para él, que ahora debe sentir una suerte de agobio liberador o de libertad disminuida que de a poco recuperará sus cauces.

¿Por qué lo confiesa ahora y no antes cuando aparentemente no había necesidad de tal revelación? Pensemos que es algo más personal y menos mezquino que el rating ¿Se está instaurando la salida del clóset como una moda? ¿Es posible hablar de una homosexualización de la sociedad o una gaycización del medio artísitico? Suena muy pretencioso lo anterior. Tal vez ocurre, entre otros factores, una creciente tendencia a visibilizar lo que solía permanecer en las sombras. Y una tendencia a dejar aparcada una vergüenza que no necesariamente se está transformando en orgullo. ¿Habría por qué?

Que siga habiendo este tipo de manifestaciones de gente famosa que se asume como no heteresosexual, contribuye a la normalización de prácticas sexuales que dan cuenta de un deseo que elige una diversidad de objetos para ser satisfecho. Y alienta la posibilidad de desmontar la heterosexualidad como única vía de complementariedad erótica, sexual, afectiva entre los sujetos; critica también su carácter de natural, de un estatus dado por la naturaleza, como una esencia, amén de que trastoca las afirmaciones que aseguran que no estar en el carril straight significa estar en la enfermedad, lo anómalo, lo incorrecto.

Con todo, hay todavía mucho por hacer a favor de una auténtica diversidad sexual, es muy común toparse con personas asumidas como heterosexuales que desconocen el significado de lo que significa ser no-hetero, viven con mitos sobre la transexualidad, lo travesti y el mundo transgénero ni siquiera existe en su horizonte de expectativas, pero el asunto se agrava cuando uno charla con chicas y chicos no heterosexuales y se descubre que también ellas y ellos ignoran mucho del amplio grupo al que pertencen o dicen pertenecer.

La ignorancia es igual en un sector y otro, lo que favorece que los clichés y los estereotipos sobre otras formas de vivir el placer sexual se mantengan anquilosados. La gente no heterosexual quiere fiestas, antros, espacios para ligar y departir en pareja o con amistades sin preocupaciones, exige derechos sin plantearse cuáles son también sus obligaciones. No investiga, no lee, no va más allá de la inmediatez del orgasmo clandestino y por eso más rico, quizás. Sin una cultura del reconocimiento de lo que implica estar en una orilla o en otra, difícilmente se vencerá la polaridad buga-gay, straight-queer, los normales-los anómalos.

Los espacios se conquistan. No basta el grito de liberación que anuncia el principio de un nuevo recorrido si no se es constante en la lucha de esa reapropiación del sujeto no heterosexual. Que siga habiendo coming out, pero también mayor acercamiento a eso que se denomina -en algunos escenarios- cultura LGBTi-Q.

No hay comentarios: